Nunca he apreciado mucho la música ni las letras de Bob Dylan. Por alguna razón, no conectaba con su poesía ni con su ritmo. Ahora, a los 46 años, tras un mes encerrado en casa por el Covid–19, he descubierto que «A hard rain’s gonna fall» es una canción maravillosa, con imágenes muy profundas. (Ver letra completa) Mejor tarde que nunca.
I saw ten thousand talkers Whose tongues were all broken I saw guns and sharp swords In the hands of young children
Es curioso que la canción evoca casi siempre espacios abiertos, como si Bob fuera un mensajero que nos traiga noticias del exterior, consejos de aguantar, de esperar tiempos sombríos y duros, chaparrones que nos darán fuerte.
I’ve stumbled on the side of Twelve misty mountains I’ve walked and I’ve crawled on Six crooked highways I’ve stepped in the middle of seven sad forests I’ve been out in front Of a dozen dead oceans I’ve been ten thousand miles in The mouth of a graveyard
Y las personas heridas
I met one man Who was wounded in love I met another man Who was wounded in hatred
Me encanta el esquema de cada estrofa:
- BEEN
- SEEN
- HEARD
- MET
- DO
Nos hace preguntas muy relevantes:
- ¿Dónde has estado?
- ¿Qué has visto?
- ¿Qué has oído?
- ¿A quién te has encontrado?
y, sobre todo:
- ¿Qué vas a hacer ahora?
Nos está cayendo un chaparrón. Y el duro de verdad va a caer pronto.
Deja una respuesta