De Barrapunto: Publicación científica libre: quien paga, manda, basándose en un mensaje en el interensantísmo blog de madri+d
Muy interesante discusión (para aquellos que estén en el mundo académico)
La mayoría de los avances científicos tienen como destino principal la publicación por parte de los autores en alguna revista científica. Esta es la principal forma en la que los científicos cumplen con uno de los axiomas principales de la ciencia en el último siglo: la fiscalización de los trabajos por la comunidad científica. Las revistas científicas internacionales suelen ser las más exigentes en sus filtros para publicar y en cada campo de investigación suele haber un abanico de buenas, regulares y malas revistas…
El problema surge cuando las revistas, que suelen pertenecer a grupos editoriales que (¡qué casualidad!) quieren ganar dinero con las mismas. Las editoriales venden suscripciones (parciales o totales) de las revistas a las instituciones científicas. Y sólo aquellos que las compran tienen, en principio, acceso a ese conocimiento. Si una institución paga el trabajo de un científico, ¿tiene derecho a exigirle dónde publicar su trabajo?(El caso reseñado es el de una institución -Wellcome Trust- que obliga a publicar en revitas abiertas)¿Qué ocurre si esta institución es pública?¿De quién es el producto del trabajo de un científico?
Hace tiempo que sostengo que las universidades deberían favorecer que sus científicos pusieran TODOS sus trabajos publicados en sus webs personales. Cuando esto ocurre, la difusión y el prestigio de los científicos sube, creo que eso es claro. Y las editoriales tampoco ponen muchos problemas (la mayoría de los autores importantes en redes sociales publican todos sus trabajos en su web, incluidos los borradores sin corregir. Un Ejemplo: Barry Wellman)
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