Benito Castro abre su blog y me inauguro metiéndole caña. Él nos cuenta las dificultades de aunar comunicación interna y externa.
«Alma y símbolo. La mezcla de ambas, en las justas medidas necesarias, es la clave del éxito. Desde luego lo esencial es el alma, pero requiere de un vehículo, de un símbolo. Esta estructura tan sencilla es la base de cualquier proceso de comunicación».
«Las organizaciones son estructuras que se construyen de una manera u otra en función de sus finalidades. Desde este punto de vista, probablemente antes que la organización en sí, sería el fin que esta pretende lo que definiría lo que apuntas de organizaciones como «un sitio donde seres humanos hacen cosas interesantes». Es decir, por poner ejemplos, una tienda donde se hacen fotocopias es una organización, pero bajo mi punto de vista, no hace cosas interesantes.
Una ONG por contra es una organización que, en principio, está llamada a hacer cosas interesantes/justas. Así que, como conclusión previa, es la finalidad lo que marca lo interesante o no que pueda ser una organización.
Otra cosa es cuan bien organizada está una organización, valga la redundancia, porque, en este sentido, la fotocopiadora puede funcionar muy bien y la ONG ser un caos. Este aspecto es crítico también: una organización cualquiera sin orden ni concierto, por muy interesante que sea su tarea, puede convertirla en no interesante. Y lo contrario, el plus de organización de la tienda de fotocopias, puede favorecer un clima que haga interesante hasta esta anodina actividad.
La secuencia sería por tanto: crear una organización eficiente para alcanzar un buen resultado, siempre con la clave humana de por medio (si no, no juego). Y en medio, comunicación inteligente y fluida. Ella es el vehículo que nos llevará a un puerto o a otro».
Muchas gracias Benito. Es posible que debiera haber incluído una coletilla en la frase «una organización como un sitio donde seres humanos hacen cosas interesantes».
Me explico: Si la organización no hace cosas interesantes (por ejemplo, una copistería), ni está organizada de forma interesante, ¿por qué no presentarla como un sitio donde trabaja «gente interesante»? Con las herramientas adecuadas, la formación y la motivación precisas, puedes ayudar a presentar una cara humana de organizaciones (si ese es uno de los objetivos estratégicos de las mismas), por no hablar de mejorar la comunicación intra y demás.
Resumiendo:
1)Fines,
2)Sistema de trabajo (modelo organizativo)
3)Objetivos (Productos)
4)Personas
Los tres primeros elementos pueden ser (o no) interesantes, pero el último siempre está ahí, siempre puede sacarse miga de esa hoya. Y usarlo para la estrategia de comunicación global. ¿Quién conoce mejor los productos que la gente que los hace? ¿Y quién conoce mejor las novedades que hay en el negocio? Siempre se puede presentar a la gente como interesante…
Actualización (30 enero): Benito habla de un polémico anuncio de coches en el que se «ensalza» la pereza. Yo respondo:
Cuando hacía trabajos de análisis de medios de comunicación en Granada, allá por el pleistoceno, llegué a una conclusión que siempre estampo cuando hay una discusión sobre publicidad: «Si no entiendes un anuncio, es que no está diseñado para ti. No le importas al anunciante, está dirigido a otra persona»
En parte, me apetece espetar este mantra para esta discusión, pero entiendo que hay una gran diferencia entre que no importe provocar desinterés y estimular fuerte rechazo por los valores que se reflejan para llegar a clientes con perfil específico (target)
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